Melon Papaya Porfavor!

Heberto y yo habíamos salido de una junta relajada de trabajo un lunes por la mañana. Nos había ido bien, había mucho tráfico pero estábamos contentos. Yo tenía una especia de alergia-catarro que me ponía muy sensible a mi alimentación y buscaba por doquier comida para el cuerpo, es decir frutas, verduras y legumbres (lo que en realidad uno debe de comer). Heberto por otra parte es un muchacho muy sano, para que se den cuenta de que tan sano es NO TOMA, NO FUMA y NO SE DROGA (en otras palabras no se en que se divierte los fines de semana). Por lo mismo el siempre tiene antojos de fruta picada, nueces y demás con-fruturas secas que le otorguen vitalidad, fuerza y autoestima, es nadador por cierto.

Íbamos en la calle cuando se percato del carrito FRUTERO distintivo con un cubo de cristal donde se exhiben las frutas como zapatos de aparador. Señores se exalto como si hubiese visto el mismísimo Gol de Maradona en el mundial del 86!

Las Frutas!!!!!!

Yo en mi antipatía tolerante solo me reí a ciegas y proseguí con la exuberante celebración y alce mi mano para indicarle que nos íbamos a orillas y que nos alcanzara. Desde que lo vi sabía que no lo había ido bien por la mañana. Su carro lleno de frutas, el cansado y con cara de estreñido se orillo mas ahuevo que a fuerzas. Proseguimos con el protocolo..

-¿De que tiene?

- Mango, Melón, Sandia, Piña, Mango (otra vez), Jicama, Pepino y Naranja.

- (siguió la pregunta natural) ¿Cuanto cuesta?

-Solo trabajo de a 18 joven (No me pidas otra cosas porque no te la voy a vender CABRON!!!!)

Yo observe la fruta verde y triste y decidí desertar en la que según yo seria una transacción injusta por no decir RATERA!!!!

Heberto un poco mas amante de la vida y de la asistencia social decidió compensar el esfuerzo del frutero con la adquisición de un vaso transparente de litro de fruta VARIA.

-Pues le puedes echar Sandia, Melón y Piña por favor.

Entonces sucedió queridos lectores. El Frutero vertió violentamente la fruta vieja de otros vasos que no se habían vendido de piña y sandia y mutilo un pedazo de PAPAYA!!! Así es PAPAYA!!! Yo voltee a mí alrededor para cerciorarme que efectivamente no hubiera otro despistado que mientras no nos hayamos dado cuenta haya solicitado tal vaso de PAPAYA. Heberto con una sonrisa en el rostro le comento:

Oye pero te pedí MELON, no PAPAYA!

Descaradamente y con toda la furia que caracteriza al llano futbolero le contesto….

PUES AQUÍ SE DICE MELON PAPAYA JOVEN!!!

Atónitos nos observamos mutuamente.
Heberto pago.
Nos subimos al carro.
Un breve silencio se apodero del ambiente...

Queridos lectores…el trayecto de donde estábamos a mi destino final duro 15 minutos…. mismos de los cuales no pare de reír intensamente junto con Heberto… jajajajajaj melón papaya..decíamos… melón papaya …reíamos…

¡Melón Papaya señores! ¡Melón Papaya! Habíamos descubierto la nueva fruta del infortunio…. jajajajaj.